El proyecto inicial había previsto un porche en la fachada principal con una luz de más de 11 metros con una triple hoja corredera de aluminio. Esto es un reto arquitectónico muy básico para obra civil pero no es tan habitual en obra residencial.
De hecho, es muy habitual ver viviendas realizadas con un estilo contemporáneo y presupuestos altos pero con horrorosos pilares que destrozan la intención inicial del proyecto.
La estructura superó este primer escollo usando forjados con losa maciza de hormigón y jácenas de canto que aportan rigidez y minimizan la flecha permitiendo luces grandes.
Los forjados se soportaron mediante pilares de acero.
El segundo reto consiste en encontrar una ventana corredera de gran formato capaz de cubrir ese hueco sin utilizar feos montantes. De hecho hay previstas 2 correderas idénticas: una en la fachada principal con salida al porche y otra en la fachada trasera.
Una de las viguerías de esta obra es una ventana esquinera con vidrio “a hueso” o lo que es lo mismo, dos vidrios que se encuentran en esquina sin utilizar un marco.
La historia empieza con este render.
La mayor parte de las ideas de un arquitecto que implican ir un poco “mas allá” de lo habitual mueren antes de hacerse realidad. Las causas del aborto son varias:
CAUSA 1: Upps!! ¿Dónde está el pilar que aguanta esa esquina?
CAUSA 2: Upps!! ¿Cómo ponemos ahí una persiana?
CAUSA 3: El aluminista no se atreve a hacer eso (o el que te lo hace te cobra un riñón).
Si hay un promotor cabezón y masoquista a partes iguales es posible que el proyecto salga adelante pero habrá que echarle codos seguro.
De momento el proyecto aguanta el primer asalto cuando el plano de estructuras permite soportar el voladizo dejando la esquina libre de pilares.
Eso sí toda la obra está coronada por una jácena que impedirá la colocación de cajas de persiana convencionales.
En el render previo a ejecución el voladizo se ha mantenido y el pilar estructural aparece aunque retrasado unos metros de la línea de fachada.
El segundo asalto empieza con el reto de encontrar una forma de sombrear esta vivienda en esta zona.
Las persianas convencionales quedan descartadas porque no caben bajo la jácena.
Las alternativas que se me ocurre valorar son:
Buscar unas persianas que se hagan en esquina.
Una corredera lateral.
Otro tipo de sombreado como un screen de exterior.
No poner sombreado exterior.
Como soy un cabezón empedernido lo de “no poner sombrado exterior” lo descarto. Hablamos de una fachada que recibe el sol de pleno y que por mucho cristal bajo emisivo que pongamos y una cortina opaca interior; el sentido común te dice que mejor parar el sol fuera de la casa que una vez dentro.
Una hoja corredera lateral no tiene donde esconderse en la fachada. La podría dejar vista pero lo que buscamos es mantener la pureza del proyecto original. Descartada.
Una solución tipo screen existe. Es importante que este screen pueda recoger en el poco espacio que se dispone bajo la jácena porque no quiero ver una caja vista en la fachada. Obligaría por eso a adoptar esta solución para todas las ventanas de la casa.
Las dudas que tengo sobre este sistema son varias:
El tejido screen a la intemperie ¿cuanto puede durar? No olvidemos que se trata de tejido y que está directamente expuesto al sol. Condiciones muy duras para el material de screen.
¿Cómo soporta el viento? El tejido no deja de ser una especie de “vela” expuesta al aire.
Y por último… ¿cuanto cuesta esto?
El fabricante es Renson, con el modelo Panovista y queda descartado con la tercera pregunta porque cuesta más el estor que la ventana entera.
No quedan muchas más alternativas que optar por una persiana de tipo veneciana que:
Debe recoger en apenas 20cm.
Debe tene algún tipo de solución sin guía para esa esquina.
Debe ser “pagable”.
La solución finalmente la encontramos en una veneciana de Warema que permite dos tipos de guiado: carril y cable y que se adapta al presupuesto.
El guiado cable nos permite prescindir del carril en la esquina y sustituirlo por dos cables en ese punto.
A día de hoy además Warema tiene una solución que permite prescindir de los cables uniendo las lamas en la esquina mediante una pequeña pestaña flexible. ¡Parece recién caído del cielo!
NOTAS sobre venecianas: sirvan como cultura general.
Las venecianas tienen la ventaja de poder bascular y permitir tamizar la luz pero dependiendo de su perfil no permiten cerrar el paso de luz. De hecho hay dos tipos de perfil:
Perfiles en forma de C (o forma de media luna), son estéticamente más limpias pero no pueden cerrar completamente el paso de luz.
Perfiles en forma de Z (más o menos), son estéticamente discutibles (sobre todo por el interior) pero permiten cerrar el paso de luz.
Otra cosa a tener en cuenta es lo que se llama “altura de paquete”. Básicamente viene a decir, cuanto ocupa la veneciana en altura una vez recogida. Esto es importante para tener previsto el cajón donde ocultarla de la vista cuando este recogida.
Para cubrir el mismo hueco de ventana hará falta un menor número de lamas anchas (digamos de 90mm o 100mm), que si usamos lamas estrechas (de 70mm por ejemplo). Hay que optar por tanto por lamas anchas cuando queremos que el cajón sea lo más pequeño posible.
Este detalle es muchas veces ignorado o imprevisto y el resultado son cajones vistos en fachada.
Por último, el aluminista escogido se atreve a ello, así que de momento esta opción se mantiene viva.
Retomando el orden de fabricación, toda la ventana lleva un marco metálico realizado a medida en chapa doblada, e incluyendo el cajón donde la veneciana se ocultará. Esta estructura acaba siendo una pequeña obra de ingeniería por sí sola y es uno de los elementos cuyo plazo de entrega ha estresado el proyecto.
Con los dinteles colocados la obra puede seguir avanzando con aplacados de fachada hasta llegar el día en que colocamos los cerramientos de aluminio y los cristales.
Merece mención especial el encuentro entre las dos hojas en la esquina. Pensemos que cada hoja tiene dos pares de cristales laminados con una cámara de aire intermedia. La unión entre hojas se hace dejando uno de los laminados exteriores sobresalir de forma que forma una L sobre la que apoya la segunda hoja.
La maniobra de colocación es compleja por la altura, el ajuste, el peso de las hojas (más de 600 kg) y el riesgo de rotura en la esquina, que es el punto más débil.
Primero debe entrarse la hoja mayor ligeramente inclinada para poder entrar. La grúa no toca el dintel por milímetros.
La hoja se centra horizontalmente, se apoya en el perfil de base y ya se puede ir a buscar la vertical para fijar el montante superior.
A partir de ahí, la colocación de la segunda hoja (más pequeña) se hace desde dentro, con mucho cuidado para no romper el punto más débil que es la unión entre ambas hojas.
Y este es el aspecto DESPUES de colocar cristales.
Por el tipo de unión nunca queda la unión transparente. La silicona de unión y la masa que cierra la cámara de aire deja una linea vertical negra.
Las persianas quedan recogidas en el interior del dintel.
Haré un pequeño detalle de la historia de este marco en la fachada trasera. Es una pequeña guinda de la obra.
En origen el marco estaba previsto rehundido.
Los estructuristas indicaron que esta disposición era incompatible con una jácena estructural y se descartó “morder” esa zona de la cubierta.
NOTA: A día de hoy creo que hemos matado moscas a cañonazos y que una losa de cubierta que sólo soporta su propio peso podría haberse solucionado perfectamente. Pero yo no soy ingeniero de estructuras y la decisión ya está tomada así que cierro nota.
Finalmente se proponen dos alternativas respetando la linea de fachada:
Me decanto por la segunda opción. Creo que estéticamente es más bonito trabajar con un volumen cerrado.
Ahora hemos de decidir si esta ventana tendrá persiana o no. Si optamos por no hacer cajón de persiana la podremos hacer de 260 cm de altura. Al ser un elemento singular no afectará a la línea de fachada y preferimos esta opción respecto a dejarla a 240 cm.
Se diseñan los planos de sección del marco por parte del arquitecto.
El proveedor entrega una primera versión de planos de fabricación y hacemos algunas anotaciones. Por dar agilidad a la obra y porque esto es un tema que llevo en mis genes hago la revisión personalmente.
El proveedor del enmarcado (HOTPINT) entrega los planos de fabricación definitivos.
Una vez recibidos de fábrica se monta el cerco en el hueco de obra.
Y por fin una visión general con la fachada revestida.